Plaza Hernán Cortés
06411 Medellín, Badajoz
A partir de la segunda década del siglo XIX, las casas que componían la manzana que ocupaba la actual Plaza de Hernán Cortés se encontraban en una situación ruinosa como consecuencia de la estancia del ejército francés en nuestra Villa entre el 28 de Marzo al 12 de mayo de 1809. El origen de el acantonamiento de tropas francesas en la villa de Medellín fue consecuencia directa de la Batalla de Medellín, derrota sufrida en el marco de la Guerra de la Independencia Española, (1808-1814). Las pérdidas económicas, sociales y patrimoniales originadas por la Batalla y la posterior estancia del ejército galo en Medellín hicieron que el urbanismo de la villa, en general, y de esta céntrica manzana, en particular, se continuase arrimando progresivamente a lo largo del siglo XIX. Entre las casas que ocupaban esa manzana -delimitada por la calle de la Feria, la Plaza Vieja, la calle de Jariegos y del Reloj-, se encontraba la casa natal de Hernán Cortés.
En 1883, el recién elegido alcalde de la Villa, que ya lo había sido en otras ocasiones, D. Juan Damián de Tena y Moreno acomete una reforma urbanística de envergadura en Medellín. En primer lugar decide expropiar las 23 casas que componían la citada manzana -algunas de ellas reducidas prácticamente a solares- para crear una plaza que posteriormente acogiera el monumento a Hernán Cortés.
En 1990, se haría realidad el anhelado monumento a Hernán Cortés, que sería inaugurado el 2 de diciembre de 1890, aniversario de la muerte del ilustre metelinense en Castilleja de la Cuesta (Sevilla).